¡A romper las barreras!---- 2 Timoteo 1:7

 ¡A romper las barreras!

 2 Timoteo 1:7 Porque no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

 -Estoy seguro —exclamó Tito—. Estoy seguro de que si digo algo acerca de Jesús a mis amigos, me rechazarán allí mismo. El año pasado un amigo mío de la iglesia empezó a testificar a los chicos en el equipo de fútbol. Para cuando terminaron de hacerle burla, estaba tan caído que prácticamente tuve que levantarlo del suelo.

 Está bien. Seamos sinceros. Comentemos qué sucedería si te sumas al equipo de rescate de Dios. ¿Cómo reaccionarían las personas a tu alrededor si les hablaras de Jesús? Pensemos en las peores cosas que podrían pasar.

 •   Podrían dejar de ser tus amigos.

 •   Te podrían criticar a tus espaldas.

 •   Te podrían rechazar por tener convicciones firmes.

 •   Podrían no invitarte a sus fiestas de cumpleaños.


 •   Podrían reírse de ti por creer en Dios.

 No estoy diciendo que no te pasaría ninguna de estas cosas si cuentas a otros acerca de Jesús. Pero, ¿sabes que sería muy probable que sucedan cosas buenas? Pensemos en algunas de éstas:

 •   Podrían llegar a ser más grandes y mejores amigos tuyos.

 •   Podrían dar gracias a Dios por ti.

 •   Podrían respetarte por tener convicciones firmes.

 •   Podrían invitarte a sus fiestas de re--cumpleaños para siempre en el cielo.

 •   Podrían llegar a conocer a Jesús.

 A nadie le gusta ser objeto de burlas. Pero los creyentes se inventan millones de excusas para no involucrarse personalmente en la misión de rescate de Dios. Quizá nos preocupemos porque no somos lo suficientemente buenos, o porque no sabemos qué decir. Pero por lo general nuestro peor temor es cómo reaccionarán los no creyentes. En otras palabras, lo que piensa la gente es más importante que el asombroso mensaje de liberación que tenemos para compartir con ellos. Dios no quiere que tengamos miedo.

 Confía en que Dios te dará la seguridad que necesitas. Luego toma un paso de fe y habla con otros. Al hacerlo, descubrirás la valentía de Dios en tu vida, justamente cuando la necesitas. ¡Y seguro que, pase lo que pase, no terminarás tan caído que prácticamente te tengan que levantar del suelo!

  

 Por Josh McDowell

                        

Comentarios

Entradas populares de este blog

Yo iré delante de ti Isaías 45:2

LOS NOMBRES DE DIOS,Y ÚLTIMA PARTE DE LOS NOMBRES DE DIOS